Ellas...

Jazmín tiene 7 años. Es hija única y vive con su mamá. Es dulce, espontánea, cariñosa, movediza, charleta, divertida, curiosa, inocente. Es una nena llena de sueños, llena de ganas de aprender, jugar, hacer amigos, de compartir.
Jazmín es un torbellino que contagia y saca una sonrisa a quien tiene alrededor.


Andrea es Formoseña, es mamá y vive para su hija. Es sencilla, tímida, amable, dulce, trabajadora, noble. Tiene un tono de voz suave, mirada triste, cansada. Tiene una historia de vida ajustada, pero tiene espíritu, busca, se arriesga y va por el progreso.
Andrea tiene 25 años y es la mamá de Jazmín.

Hace un poco más de un mes que Mamá-Andrea decidió dejar todo en su Formosa querida, gastó casi todo sus ahorros en pasajes, armó dos bolsitos con ropa y los juguetes de su nena, atravesó el país de punta a punta y se fue para Santa Cruz "porque alla está la plata", le dijeron. Y así fue como llegó a Gallegos en busca de trabajo. Luego de una semana de no encontrar nada... "vaya a Calafate, alla siempre están buscando". Bus a Calafate y ahi consiguió trabajo en un hostel en El Chaltén, lugar donde conocí a estas dos personitas hermosas; que me dejaron además de un cariño enorme, mucho de enseñanza y también bastante de impotencia.

Historias como la suya hay en cantidad...esto es sólo la intro de una historia de vida llena de esfuerzo, ganas de progreso, dar todo por un hijo, ir en busca de los sueños...en fin podría darle diez mil títulos diferentes...podría explayarme muuucho más, pero voy a limitarme por ahora.

El punto es como uno relacionándose con la gente, ya sea viajando o a la vuelta de la esquina, sale un poquito de su tupper, se replantea y valora un poco más las cosas NO?